El apeo de árboles: hacheros, aserradores y motoserristas.
Por José Miguel Nieto. Agente de Medio Ambiente.
El apeo de árboles consiste en cortar un árbol por su base y derribarlo. Existen distintas técnicas de apeo en función del grosor del árbol, su posición con respecto a otros árboles condiciones climatológicas, la orografía, etc.
Antes de la aparición de la motosierra, los árboles se cortaban con hacha y sierra manuales (tronzadores), para lo que se requería una técnica especial y que se adquiría con la experiencia. Cuando se mecanizó el trabajo, los viejos tronzadores fueron a parar a las cámaras (desvanes) de los cortijos serranos. Aunque la motosierra se empieza a fabricar en serie en los años veinte del siglo pasado, en estos montes no se generaliza el uso hasta mediados del mismo. Los hacheros y aserradores se convierten de la noche a la mañana en motoserristas y era tal la demanda de trabajo y lo complicado de la tarea por la orografía del terreno, que los mejores del país, muchos de ellos serranos, trabajaban para Explotaciones Forestales de Renfe, consiguiendo varios campeonatos de España de la especialidad.
Hacheros y aserradores, primera mitad del siglo XX. Foto INIA
Las hachas y las sierras tronzadoras se siguieron utilizando de forma doméstica, por lo que su uso, aunque de forma puntual, se prolongó en el tiempo.
Antiguamente, la destreza en el manejo de hachas y tronzadores suponía unos reales extras en el trabajo, pues la mayoría de los trabajos forestales se hacían al destajo. A veces, incluso, era motivo de apuestas entre los operarios. En otros puntos de España, como en el País Vasco, esas apuestas se convirtieron en competiciones deportivas. Y no solo aquí en la Península, países con gran tradición forestal, como Canadá, son muy aficionados a competiciones de sierra manual y hacha.
En el FSH vamos a revivir aquellas apuestas de antaño y vamos a volver a competir en el manejo del hacha y el tronzador. Se trata también de recuperar una tradición de Vadillo, ya que hasta hace unos treinta años, se hacían competiciones de hacheros con motivo de las fiestas. En el extremo norte del Parque Natural, en la localidad de Siles, se celebra un concurso de hacheros desde 1998.