Los Bolos Serranos.
Por José Miguel Nieto Ojeda. Presidente de la Federación Andaluza de Bolos.
El juego de los bolos es una de las más viejas tradiciones serranas que aún se mantienen vivas. Actualmente representa una de las principales señas de identidad de la cultura popular de estas sierras, muestra inequívoca de los dos factores que justifican la rica etnografía que se conserva en estas comarcas. Por un lado, la diversidad de este tipo de manifestaciones viene dado por un pasado histórico, caracterizado por las distintas colonizaciones que, procedentes de distintos puntos de España, se producen, sobre todo, a partir de la Reconquista.
El juego de los bolos que ha llegado hasta nosotros en estas sierras, trasmitido de padres a hijos a lo largo de generaciones, es el resultado de un proceso evolutivo en el discurrir de los siglos, que han modificado gran parte de las normas y lances de los “birlos”, juego primitivo de origen medieval del que derivan la mayor parte de las modalidades que existen en Europa.
Modalidades.
Al margen de ciertas peculiaridades locales y comarcales, los bolos serranos se juegan de dos formas distintas:
1. Modalidad Valle o de Tres Mingos. Es la variante más antigua, y conserva algún lance de los bolos primitivos, como la acción del “birlar” o “bilrrar”. Se juega con tres mingos (bolos) y es un juego mixto de derribo (bolos) y de avance (pasabolos). La distancia a la que se tira es de 3 metros (benjamines y alevines), de 5 metros (damas, veteranos e infantiles) o de 8 metros (a partir de cadetes masculinos).
2. Modalidad Montaña o de Un Mingo. Es un juego de pasabolo puro (avance), ya que el único objetivo del lanzamiento es el de alejar lo máximo posible el mingo tras el impacto con la bola. Es una derivación, por simplificación de normas, de la modalidad anterior, jugándose con un solo mingo, sin birle. La distancia de tiro es menor también que en la modalidad valle, situándose el mingo entre 3,5 y 5 metros de la línea de tiro.
El terreno de juego.
Se trata de un deporte que se practica al aire libre. Tradicionalmente las boleras o “boleas” se han situado en lugares más o menos llanos o con pendiente ascendente. Lo ideal es que se ubiquen en terrenos libres de obstáculos, de dimensiones variables (entre 50-100 metros de longitud por 4-20 metros de anchura), procurando que la Zona de Carrera y la de Tablón sea llana.
La bolera serrana consta de tres zonas:
1. Zona de carrera o Tirada. Se trata de un área con suelo firme, compacto y antideslizante, donde el jugador o jugadora realiza la carrera para ejecutar el lanzamiento de la bola, rematada en una línea, denominada línea o raya de tiro. Debe tener una longitud mínima para la carrera de 8-10 metros.
2. El Tablón. Se trata del lugar donde se colocan los bolos o “mingos”. Lo habitual es que sea un tablón de madera enterrado, con la superficie superior a ras de suelo. En las últimas décadas la superficie del tablón se suele cubrir con una chapa metálica, para evitar el desgaste de la madera.
3. Zona de rayas. Es el terreno más amplio de la bolera y es el lugar por donde ruedan bolas y mingos tras el lanzamiento. El campo está seccionado por una serie de líneas transversales que indican el valor de la jugada, que va de diez en diez bolos. Las rayas se sitúan entre sí a una distancia de entre 4 y 6 metros, y se marcan en el terreno mediante cuerdas, trazos o yeso. La primera raya, a la que se le da el nombre de “raya de diez” o “raya de borre”, se suele situar al doble de la distancia entre la línea de tiro y el primer mingo o mingo principal.
Material de juego.
En cuanto al material de juego necesario hay que distinguir entre la bola y los bolos o mingos:
Bola: esfera maciza, que tradicionalmente se ha fabricado de madera dura, de encina (Quercus ilex) y de enebro (Juniperus oxycedrus). En los últimos treinta años la madera se ha sustituido por el material plástico (teflón), mucho más duradero y resistente. Las bolas tienen unas dimensiones de 17 a 23 cm. de diámetro y pesan entre los 2 y 7 Kg. Posee un asidero con dos oquedades, que permite agarrarla con fuerza y que recibe el nombre de “alambradura” o “alambradera”.
Mingos: los bolos reciben este nombre y son de madera (valle) o de teflón (montaña). Tienen forma de huevo más o menos alargado, y miden de 11 a 17 cm. de alto, por 7 a 12 cm. de diámetro.
Normas básicas del Juego.
Para entender la mecánica del juego es necesario conocer los siguientes conceptos y lances:
Lanzamiento de mano: consiste en lanzar la bola, tras una breve pero intensa carrera, desde la “zona de carrera” o “tirada”, con el fin de desplazar el mingo único (modalidad montaña) o el principal (modalidad valle) lo más lejos posible desde su posición inicial (tablón), intentando en la última modalidad derribar los otros dos con el fin de aumentar el valor de la jugada. El valor de la jugada viene determinado por la raya más lejana que haya sido atravesada por el mingo principal (10,20,30, …). Si, tras ser derribado, dicho mingo no consigue sobrepasar la primera raya (raya de “borre” o de diez), el valor es de 3 bolos en “montaña” y de 4 en “valle”, donde derribar el segundo mingo vale 2 bolos y el tercero 1, independientemente de donde quede cada uno de ellos tras el impacto.
Birle o bilrre: en la modalidad valle, es el lance de juego que, situados los mingos en su posición original, se intenta su derribo lanzando la bola, en sentido contrario del lanzamiento de mano, desde la raya de “borre” o de diez. Cada mingo derribado otorga 2 bolos al jugador que “birla”.
Tirada: Es el resultado de la suma de los bolos conseguidos en la mano y en el birle, si lo hubiera.
Borre: cuando la tirada se anula por infligir las normas, se denomina borre. Es borre cuando la bola no supera la raya de diez en la modalidad montaña y cuando ni el mingo principal ni la bola superan dicha raya, en la modalidad valle.
Carga: es la suma de las tiradas de cada uno de los componentes de un equipo en cada tanda de lanzamientos.
Los partidos: aunque en los concursos y en las apuestas se puede competir lanzando un determinado número de bolas (bolos “corridos”), el sistema habitual del desarrollo de juego es el partido. Se pueden disputar los partidos entre dos jugadores, dos parejas o dos equipos, conformados habitualmente por cuatro jugadores. Tras el sorteo que decide que equipo comienza a jugar, cada miembro del mismo realiza una tirada por tanda. Los bolos conseguidos (carga) por el primer equipo (A), son la referencia para la carga que debe conseguir el equipo que tira en segundo lugar (B). Si la carga del equipo A no es superada por el B, el equipo A se anota una “raya” en el tanteo. Si, por el contrario, la carga del equipo A es superada al menos por 1 bolo por el equipo B, éste se anota la “raya”. En la primera tanda, en caso de empate en las cargas, ningún equipo se anota la raya, iniciándose de nuevo el juego. Posteriormente ya no se contempla el empate, y en caso de igualdad de cargas, la raya es para el equipo que anotó la última disputada. Cuando un equipo anota 6 rayas consigue 1 “punta”. Tradicionalmente los partidos se han jugado al mejor de 3 puntas, es decir, consigue la victoria el equipo que gana dos puntas, de 6 rayas cada una. También es común reducir los partidos a 1 sola punta de 8 ó 10 rayas.
Foto1. El Maestro Bolero Gonzálo Sánchez Ojeda, de Vadillo Castril. Foto Diego Navarrete
Foto 2, 3 y 4. Federación Andaluza de Bolos.
Vídeo. Federación Andaluza de Bolos
Actividades:
Sábado 10 de agosto de 2013
18:00 H. Talleres y concursos de Juegos Tradicionales Infantiles.
Uno de los juegos que se enseñarán es el de los bolos serranos.
Domingo 11 de agosto de 2013
9:00 H. Campeonato de Bolos Serranos de parejas, modalidad montaña (1 mingo)
11:00 H. Concurso de Bolos Serranos Antiguos. Individual, modalidad Valle, con bolas y mingos de madera.
Durante el Festival, la Federación Andaluza de Bolos tendrá un stand en la feria forestal y serrana, donde informará de los programas y actividades de los bolos autóctonos.